El sector de la construcción en Chile se prepara para un período de expansión. Según la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), durante el segundo semestre de 2025 se espera un crecimiento de la inversión entre un 3 % y un 5 %, impulsado tanto por el dinamismo de la obra pública como por un fuerte repunte de la inversión privada. Este escenario genera expectativas positivas para el mercado inmobiliario, especialmente en ciudades en pleno crecimiento como Curicó, donde la demanda por viviendas de calidad sigue en alza.
Uno de los factores más relevantes detrás de esta proyección es la ejecución del presupuesto del Ministerio de Obras Públicas (MOP), que ya alcanza casi un 90 % de avance, lo que asegura continuidad en proyectos de infraestructura clave. Estas obras no solo mejoran la conectividad, sino que también aumentan la plusvalía de las zonas cercanas, favoreciendo directamente al desarrollo habitacional y comercial en regiones.
En paralelo, la inversión productiva privada muestra señales de recuperación sólida, con un alza proyectada de un 24 % interanual. Este repunte se debe principalmente a proyectos ligados a la minería, energía y concesiones, lo que genera un efecto multiplicador en la economía: más empleos, más demanda de servicios y un ecosistema favorable para el crecimiento inmobiliario.
Para Curicó y el Maule, estos indicadores son especialmente relevantes. El desarrollo de infraestructura a nivel nacional mejora la conexión con grandes centros urbanos, como Santiago y Talca, potenciando a la región como un polo atractivo para quienes buscan combinar calidad de vida, buena conectividad y precios competitivos en comparación con la capital. La construcción de proyectos residenciales que respondan a estas nuevas dinámicas será clave para aprovechar el ciclo positivo que se avecina.
En conclusión, la proyección de crecimiento del sector construcción no es solo una buena noticia para el país, sino también una oportunidad concreta para las inmobiliarias locales. Apostar por proyectos que integren eficiencia, sostenibilidad y cercanía a nuevas infraestructuras será decisivo para responder a las necesidades de las familias que buscan en Curicó un lugar donde vivir y proyectar su futuro.