En los últimos años, la industria de la construcción en Chile ha comenzado a transitar hacia un cambio profundo, marcado por la industrialización, la digitalización y la sostenibilidad. Durante este mes (septiembre 2025), Santiago fue sede del Encuentro Internacional de Construcción Industrializada (EICI 2025), evento que reunió a expertos nacionales e internacionales y consolidó a nuestro país como epicentro latinoamericano en este ámbito. Esta tendencia apunta a transformar cómo concebimos y ejecutamos proyectos inmobiliarios, con impacto directo en la calidad, costos y tiempos de construcción.
La construcción industrializada no sólo permite acelerar procesos gracias al uso de piezas prefabricadas y ensamblajes más rápidos, sino que también asegura un mayor control de calidad. En mercados locales como Curicó, donde el dinamismo inmobiliario se mantiene en alza, estas innovaciones abren la posibilidad de ofrecer viviendas más accesibles y eficientes, con plazos de entrega reducidos y diseños adaptados a la vida moderna.
Otro aspecto clave es la integración de herramientas digitales como Building Information Modeling (BIM), que facilita la planificación integral de los proyectos desde su diseño hasta su operación. La digitalización permite optimizar recursos, minimizar errores y proyectar escenarios más realistas, algo esencial en un entorno de alta demanda habitacional y de servicios como el que vive la Región del Maule.
Junto a la innovación tecnológica, la economía circular y la sostenibilidad se han posicionado como ejes centrales. Nuevos materiales reciclables, reducción de residuos en obra y eficiencia energética en viviendas son ya una exigencia, no un lujo. En una ciudad como Curicó, donde cada vez más familias buscan espacios sustentables para criar a sus hijos y vivir en comunidad, estas tendencias pueden marcar la diferencia al momento de decidir una compra.
En definitiva, la industrialización y la bio-sostenibilidad no son solo palabras de moda: son la ruta hacia un futuro donde la vivienda será más inteligente, responsable con el medioambiente y al alcance de quienes buscan un hogar moderno y duradero. Para el mercado inmobiliario de regiones, se trata de una oportunidad estratégica para liderar con proyectos que respondan a las nuevas expectativas de las personas.
Fuentes: